Cuando sales el domingo por la mañana de trabajar durante toda la noche, lo primero que miras es hacia el cielo, te subes al coche y durante todo el camino puedes contemplar la siguiente estampa:
Cuando contemplas esta bella postal es difícil no pensar que, si existe algo tan bello en el mundo, vale la pena vivir por ello y que no debe ser tan difícil que todos vivamos en paz en nuestro mundo, bajo el cielo de vainilla, sobretodo, cuando estás escuchando por la radio la obra y el legado de ese gran hombre llamado Gandhi, por que ya lo decía él, "no hay camino hacia la paz, la paz es el camino".
lunes, 2 de febrero de 2009
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